Un relleno degradado es una transición suavemente mezclada entre varios colores o sombras, formando un efecto de degradado visual dentro de una forma o área cerrada. Permite la combinación gradual entre múltiples paradas o tonos de color, creando una apariencia visualmente dinámica y de transición. Los rellenos degradados pueden variar en dirección (lineal, radial o angular) y ángulo, así como en el número y ubicación de las paradas de color.
Estos rellenos se emplean a menudo en diseño gráfico, diseño web, interfaces de usuario, ilustraciones y arte digital para agregar profundidad visual, enfatizar ciertos elementos y crear una sensación de movimiento o armonía en el diseño. Añaden un toque de interés visual y jerarquía visual, haciendo que los elementos se destaquen o se mezclen con el fondo.
La creación de un relleno de degradado generalmente implica seleccionar dos o más colores y luego usar una herramienta o función de degradado dentro de un programa de software (por ejemplo, aplicaciones de edición de imágenes o diseño vectorial) para ajustar propiedades como transiciones de color, ángulo de degradado y opacidad. Los rellenos degradados se pueden aplicar a formas sólidas, elementos de texto o como fondos para mejorar la comunicación visual y el atractivo estético.