Windows Media Player suele utilizar entre 70 y 100 megabytes (MB) de memoria cuando está activo. Sin embargo, dependiendo de la versión de Windows Media Player instalada y de la complejidad del archivo multimedia que se esté reproduciendo, puede utilizar hasta varios cientos de megabytes de memoria. Además, el uso de la memoria puede aumentar significativamente si hay más de un archivo multimedia abierto en el reproductor al mismo tiempo.