Enviar mensajes falsos en WhatsApp es
poco ético y puede tener graves consecuencias como violaciones de privacidad, fraude financiero, daño a la reputación o problemas legales. En su lugar, concéntrese en participar en conversaciones genuinas y productivas. Existen muchas formas legítimas y divertidas de comunicarse en WhatsApp sin recurrir al engaño.