1. Insertar marca de agua:
Agregue una marca de agua visible u oculta a su imagen que indique la propiedad. Esto puede disuadir a las personas de usar su imagen sin permiso y permitirle rastrear la fuente si alguna vez se usa ilegalmente.
2. Desactivar clic derecho:
Utilice JavaScript o HTML5 para desactivar el menú contextual en su sitio web, lo que dificulta que los usuarios guarden sus imágenes. Sin embargo, los usuarios expertos en tecnología pueden evitar fácilmente este método.
3. Proteja sus imágenes con contraseña:
Aloje sus imágenes en un servidor o galería protegidos con contraseña para que solo los usuarios autorizados puedan acceder a ellas. Esta opción es muy segura, pero puede no resultar práctica si desea compartir sus imágenes con una audiencia más amplia.
4. Utilice una CDN (red de entrega de contenido):
Una CDN puede ayudar a evitar que las imágenes se descarguen directamente desde su servidor. Cuando un usuario intenta acceder a una imagen, la CDN entregará la imagen desde una ubicación cercana, lo que hará más difícil copiarla o descargarla.
5. Acción legal:
Si descubre que alguien ha copiado y utilizado su imagen sin su permiso, puede considerar emprender acciones legales contra esa persona. Esto puede incluir enviar una carta de cese y desistir o presentar una demanda por infracción de derechos de autor.
Nota :Es importante tener en cuenta que estos métodos pueden ayudar a disuadir a las personas de copiar y descargar sus imágenes, pero no son infalibles. Siempre hay formas para que determinadas personas puedan eludir estas protecciones y obtener acceso a sus imágenes. La mejor manera de proteger sus imágenes es estar atento a monitorear su uso y tomar medidas cuando sea necesario.