Los números contables suelen tener un formato específico para mejorar la legibilidad y la precisión. Hay ciertas características de este estilo de formato que no son aplicables al formato de número contable. Estos incluyen:
1. Puntos decimales: Los números contables que representan valores monetarios normalmente no tienen puntos decimales. Los puntos decimales generalmente se reservan para cálculos o mediciones, pero no son necesarios para mostrar números enteros relacionados con la moneda.
2. Comas como separadores de miles: Si bien algunas jurisdicciones utilizan comas como separadores de miles en los números contables, no es una característica universalmente aplicable. Ciertos países, como Estados Unidos, no utilizan comas en los números contables, sino que optan por puntos o espacios como separadores.
3. Símbolos de moneda dentro del número: El formato del número de contabilidad generalmente coloca el símbolo de la moneda antes del número (por ejemplo, $100) o después del número (por ejemplo, 100$) según la práctica común en la jurisdicción específica. El símbolo de la moneda no se considera parte del número contable en sí.
4. Corchetes o paréntesis para valores negativos: Los números contables representan valores negativos utilizando corchetes o paréntesis. Sin embargo, estos símbolos no son inherentemente parte del número y se agregan únicamente para indicar un valor negativo.
5. Símbolos de porcentaje: Los números contables que representan porcentajes pueden utilizar el símbolo de porcentaje (%) después del número. Sin embargo, este símbolo no es una parte integral del número contable en sí y se utiliza principalmente para mayor claridad y contexto.
6. Ceros a la izquierda: Los números contables generalmente no incluyen ceros a la izquierda, excepto cuando sea necesario para propósitos específicos. Por ejemplo, cuando una cantidad es inferior a un dólar, se utiliza un cero a la izquierda (por ejemplo, 0,50 en lugar de 0,50).
7. Superíndices o Subíndices: Los números contables no suelen utilizar superíndices ni subíndices. Son más comunes en formatos científicos o matemáticos, pero no son relevantes para el formato de números contables.
Al excluir estas características, el formato del número contable mantiene su simplicidad, coherencia y se centra en presentar de forma clara y concisa los valores monetarios.