La principal ventaja de la radiofrecuencia (RF) sobre la tecnología infrarroja (IR) es su capacidad para transmitir datos a través de entornos sin línea de visión (NLOS). Las señales de RF pueden atravesar objetos sólidos y obstrucciones, a diferencia de las señales de IR, que requieren una línea de visión directa entre el transmisor y el receptor. Esto hace que la tecnología RF sea adecuada para aplicaciones en las que los dispositivos u objetos pueden estar ubicados en diferentes habitaciones o separados por barreras físicas. Además, las señales de RF tienen un alcance más amplio en comparación con las señales de IR, lo que permite una cobertura más amplia y una colocación más flexible del dispositivo.