Organización de datos: Las bases de datos relacionales organizan los datos en tablas, que a su vez se dividen en columnas y filas. Esta estructura simplifica la gestión de datos, permite un almacenamiento eficiente y permite una fácil recuperación y manipulación de datos.
Escalabilidad :Las bases de datos relacionales son altamente escalables, lo que les permite manejar grandes volúmenes de datos y admitir una cantidad significativa de usuarios simultáneos. Esto los hace adecuados para aplicaciones de nivel empresarial y procesamiento de big data.
Flexibilidad: Las bases de datos relacionales ofrecen una gran flexibilidad en términos de recuperación y manipulación de datos. Admiten varios lenguajes de consulta, incluido SQL, que proporciona potentes capacidades para filtrar, agregar y transformar datos, lo que permite realizar análisis e informes de datos complejos.
Compartir datos: Las bases de datos relacionales facilitan el intercambio fluido de datos dentro de una organización o entre diferentes sistemas. Proporcionan acceso controlado a usuarios autorizados, garantizando la privacidad y seguridad de los datos y al mismo tiempo permitiendo la colaboración y el intercambio de información.
Seguridad de los datos :Las bases de datos relacionales incorporan sólidas funciones de seguridad para proteger los datos confidenciales contra el acceso no autorizado, la modificación o la destrucción. Admiten mecanismos de autenticación, autorización y cifrado de usuarios, garantizando la confidencialidad, integridad y disponibilidad de los datos.