Las computadoras y las bases de datos de pacientes se utilizan ampliamente en la industria médica, pero su uso conlleva preocupaciones éticas, particularmente en lo que respecta a la privacidad del paciente y la seguridad de los datos.
- Acceso no autorizado: Los datos médicos son muy confidenciales y pueden incluir información personal crítica, historial médico, tratamientos, diagnósticos, resultados de pruebas, resultados de laboratorio, medicamentos e información de seguros. El acceso no autorizado a esta información puede provocar robo de identidad, fraude financiero, discriminación o posibles daños físicos a los pacientes si se comparte con terceros sin el consentimiento del paciente.
- Violación de datos: Las amenazas a la ciberseguridad, como la piratería informática, el malware y los ataques de phishing, pueden comprometer los datos de los pacientes almacenados en sistemas informáticos o bases de datos, lo que provoca filtraciones de datos a gran escala. La pérdida o el robo de información médica confidencial plantea graves riesgos para la privacidad y la confianza de los pacientes.
- Falta de consentimiento del paciente: En algunos casos, los datos médicos pueden recopilarse y utilizarse sin el consentimiento o conocimiento explícito de los pacientes. La falta de obtención del consentimiento informado genera preocupaciones sobre la autonomía del paciente y sus derechos a tomar decisiones informadas sobre su información de salud.
- Inexactitudes en los datos: Mantener la precisión y la integridad de los datos médicos es crucial para garantizar la confiabilidad de los tratamientos de los pacientes. Los errores humanos o el mal funcionamiento del sistema pueden provocar imprecisiones en los registros de los pacientes, lo que podría afectar los resultados del tratamiento y las decisiones tomadas por los profesionales de la salud.
- Uso secundario de los datos del paciente: Sin el consentimiento explícito del paciente, los datos médicos pueden compartirse y utilizarse para fines secundarios como investigación, análisis o marketing, que pueden no coincidir con las preferencias y expectativas de los pacientes con respecto a su privacidad.