1. Comprueba tu conexión a Internet. Asegúrese de tener una conexión a Internet sólida y estable. Si su conexión a Internet es débil o intermitente, puede provocar que se interrumpan las llamadas.
2. Reinicie su dispositivo. A veces, simplemente reiniciar el dispositivo puede solucionar el problema.
3. Actualiza Skype. Asegúrate de tener instalada la última versión de Skype. Skype publica actualizaciones periódicas que incluyen correcciones de errores y mejoras de rendimiento.
4. Compruebe la configuración de su firewall. Asegúrese de que su firewall no esté bloqueando Skype. Es posible que necesites agregar Skype a la lista de programas permitidos de tu firewall.
5. Reinstale Skype. Si ha probado todo lo anterior y aún tiene problemas, es posible que deba reinstalar Skype.
Si aún tienes problemas después de probar todo lo anterior, puedes comunicarte con el servicio de atención al cliente de Skype para obtener ayuda.