Las computadoras gubernamentales se proporcionan únicamente para uso oficial, y usarlas para fines personales durante el tiempo de servicio oficial es una pérdida de dinero de los contribuyentes. También puede ser un riesgo para la seguridad, ya que los sitios web personales pueden contener software malicioso u otras amenazas que podrían comprometer la red del gobierno. Además, el uso de una computadora gubernamental para fines personales puede violar las políticas éticas del gobierno o incluso ser ilegal en determinadas circunstancias.