1. Memoria de actualización (RAM):
- Agregue más RAM a su PC. 8 GB es un buen objetivo para juegos básicos.
2. Tarjeta gráfica:
- Considere una tarjeta gráfica usada o económica como la GTX 750Ti o AMD R7 250.
3. Unidad de estado sólido (SSD):
- Reemplazar un disco duro mecánico tradicional por un SSD. Esto puede mejorar significativamente los tiempos de carga.
4. Limpiar y mantener:
- Limpia el interior de tu PC para eliminar el polvo y la suciedad. Verifique que la refrigeración y el flujo de aire sean adecuados.
5. Overclocking (si te resulta cómodo):
- Si te sientes cómodo con ello, puedes probar un overclocking suave para obtener un poco más de rendimiento.
6. Actualizar software:
- Asegúrese de que su sistema operativo y los controladores de su dispositivo estén actualizados.
7. Configuración inferior:
- Ajuste la configuración del juego a resoluciones y gráficos más bajos para mejorar el rendimiento.
8. Verifique los requisitos del sistema:
- Asegúrate de que los juegos que deseas jugar cumplan o se acerquen a los requisitos del sistema.
9. Juegos modificados:
- Para juegos más antiguos, busca modificaciones que mejoren el rendimiento.
10. Utilice herramientas de optimización:
- Algunas herramientas de software, como Game Booster, pueden optimizar su sistema para jugar.
Recuerde que es posible que los juegos muy exigentes aún no se puedan reproducir en una PC más antigua y que ciertas actualizaciones pueden no ser rentables. Considere cuidadosamente si las mejoras justifican la inversión.