El Directorio fue el órgano de gobierno de Francia desde noviembre de 1795 hasta noviembre de 1799. Se estableció después del derrocamiento del gobierno radical jacobino del Reino del Terror y tenía como objetivo proporcionar una forma de gobierno más estable y moderada.
El Directorio estaba formado por cinco directores, que eran elegidos por el Consejo de los Quinientos, una de las dos cámaras de la legislatura francesa. Los directores tenían poder ejecutivo y eran responsables de nombrar ministros y otros funcionarios gubernamentales.
El Directorio enfrentó muchos desafíos durante sus cuatro años de existencia, incluidos problemas económicos, inestabilidad política y amenazas militares de potencias extranjeras. A pesar de estos desafíos, el Directorio pudo lograr algunos éxitos, incluida la derrota de la rebelión realista de Vendée y la firma del Tratado de Campo Formio con Austria.
Sin embargo, el Directorio finalmente no pudo superar sus problemas y fue derrocado por Napoleón Bonaparte en un golpe de estado el 9 de noviembre de 1799.