1. Declaración de Función :Primero se declara la subrutina, especificando su nombre, tipo de retorno (si corresponde) y los tipos y número de sus parámetros (si son necesarios). En el lenguaje de programación C comúnmente utilizado en Linux, una declaración de función suele tener el siguiente aspecto:
```c
tipo_retorno nombre_función(lista de parámetros);
```
2. Definición de función :La subrutina se define proporcionando su implementación, que consta del código que realiza la tarea deseada. Normalmente comienza con el carácter '{' y termina con '}'. La definición de la función incluye las declaraciones y la lógica necesarias para llevar a cabo la tarea.
3. Llamada de función :Para ejecutar una subrutina, debe llamarla desde su programa. En C, puedes llamar a una función usando su nombre seguido de los argumentos apropiados entre paréntesis:
```c
resultado =nombre_función(argumento1, argumento2);
```
4. Ejecución de funciones :Cuando se llama a una función, el control del programa se transfiere al bloque de código de la función. Los argumentos pasados a la función se evalúan y almacenan en las variables locales de la función. La función ejecuta sus declaraciones y realiza la tarea prevista.
5. Declaración de devolución :Si se espera que la función devuelva un valor (por ejemplo, un número entero o una cadena), debe utilizar la instrucción 'return' seguida del valor que se devolverá. Cuando se encuentra una declaración de 'retorno', la función termina inmediatamente y el control del programa regresa al punto desde donde se llamó la función.
6. Variables locales :Las subrutinas pueden tener variables locales declaradas dentro de su alcance. Estas variables solo son accesibles dentro de la función y no son visibles fuera de ella. Se destruyen cuando la función regresa.
7. Pasar argumentos :Las subrutinas pueden pasar argumentos de varias maneras, como por valor (se pasa una copia del argumento) o por referencia (se pasa la ubicación real en la memoria). En Linux, los argumentos normalmente se pasan por valor a menos que se especifique explícitamente lo contrario.
8. Recursión :Las subrutinas pueden llamarse a sí mismas, una técnica conocida como recursividad. Esto permite dividir tareas complejas en subproblemas más pequeños que pueden resolverse secuencialmente. Sin embargo, la recursividad debe usarse con cuidado para evitar desbordamientos de pila y garantizar una ejecución eficiente del programa.
En resumen, las subrutinas en Linux son funciones o procedimientos que realizan tareas específicas y pueden ser llamadas desde diferentes partes de un programa. Mejoran la organización, la modularidad y la reutilización del código, lo que permite a los desarrolladores crear programas más eficientes y fáciles de mantener.