1. Comprueba tu versión de DirectX:
- Presione la tecla de Windows + R para abrir Ejecutar diálogo.
- Escriba "dxdiag " y presione Entrar .
- La herramienta de diagnóstico DirectX se abrirá. Verifique la Versión número que se muestra en Sistema pestaña.
2. Descargue el tiempo de ejecución de usuario final de DirectX:
- Si su versión de DirectX está desactualizada o falta, puede descargar DirectX End-User Runtime (junio de 2010) desde el Centro de descarga de Microsoft.
- Haga clic en Descargar y seleccione su idioma.
- Una vez que se complete la descarga, haga doble clic en el archivo descargado para instalar DirectX End-User Runtime.
3. Instale el instalador web de DirectX (para juegos más nuevos):
- Algunos juegos más nuevos pueden requerir una versión específica de DirectX. Si este es el caso, el juego te pedirá que instales la versión necesaria.
- Siga las instrucciones que aparecen en pantalla para descargar e instalar los componentes DirectX necesarios.
4. Actualice los controladores de la tarjeta gráfica:
- Mantener actualizados los controladores de su tarjeta gráfica también puede ayudar a mejorar el rendimiento de DirectX. Visite el sitio web del fabricante de su tarjeta gráfica (por ejemplo, AMD, Nvidia, Intel) y descargue los controladores más recientes para su tarjeta gráfica.
5. Actualización de Windows:
- Windows Update también puede ofrecer actualizaciones de DirectX. Asegúrese de que su sistema Windows 11 esté completamente actualizado buscando actualizaciones en la Configuración aplicación.
Recuerde que las actualizaciones de DirectX son relevantes principalmente para juegos y aplicaciones multimedia. Si no realiza estas actividades en su PC con Windows 11, es posible que no sea necesario actualizar DirectX.