Paso 1:Abra la configuración de pantalla
1. Haga clic derecho en un espacio vacío en su escritorio y seleccione "Configuración de pantalla".
Paso 2:Acceda a la calibración de color
1. En la sección "Pantalla", desplácese hacia abajo y haga clic en "Configuración de pantalla avanzada".
2. En la ventana "Configuración de pantalla avanzada", haga clic en "Propiedades del adaptador de pantalla" para su pantalla principal.
3. En la ventana "Propiedades de pantalla", cambie a la pestaña "Administración de color".
4. Haga clic en el botón "Calibrar pantalla..." para iniciar el asistente de calibración de pantalla.
Paso 3:Comience el proceso de calibración
1. En la pantalla "Bienvenido", haga clic en "Siguiente" para continuar con la calibración.
Paso 4:Establecer Gamma
1. Ajuste la configuración de gamma moviendo el control deslizante para lograr una apariencia equilibrada y detallada en la imagen de muestra.
2. Haga clic en "Siguiente" para continuar.
Paso 5:Establecer brillo y contraste
1. Ajuste las configuraciones de brillo y contraste usando los controles deslizantes hasta que la imagen de muestra aparezca con detalles claros y buen contraste.
2. Haga clic en "Siguiente" para continuar.
Paso 6:Ajustar el punto blanco y el balance de color
1. Para "Punto blanco y balance de color", deje la configuración predeterminada a menos que prefiera un balance de blancos específico.
2. Haga clic en "Siguiente" para continuar.
Paso 7:revisar la configuración de calibración
1. Revise la pantalla de resumen para asegurarse de que está satisfecho con la configuración calibrada.
2. Haga clic en el botón "Anterior" para realizar más ajustes si es necesario. Si todo parece correcto, haga clic en "Finalizar".
Paso 8:Guardar perfil de calibración
1. Aparecerá un cuadro de diálogo de confirmación. Seleccione la opción "Sí, guardar esta configuración de calibración de pantalla" para guardar el nuevo perfil de calibración.
Paso 9:Reiniciar recomendado
1. Windows puede recomendar reiniciar el sistema para aplicar los cambios de calibración. Haga clic en "Sí, reiniciar ahora" o "Reiniciar más tarde" según su conveniencia.
Después de completar estos pasos, la pantalla de su monitor debería estar calibrada adecuadamente, proporcionándole colores más precisos y consistentes. Recuerde que la calibración puede variar según su pantalla y preferencias específicas, así que considere ajustar la configuración para adaptarla a sus necesidades.