1. Abra el Administrador de dispositivos:
- Presione la tecla de Windows + X para abrir el menú Usuario avanzado.
- Seleccione Administrador de dispositivos de la lista.
2. Identificar controladores obsoletos:
- En el Administrador de dispositivos, busque los dispositivos que tengan signos de exclamación amarillos junto a ellos. Estos indican controladores potencialmente obsoletos o que no funcionan correctamente.
3. Actualizar a través del menú contextual:
- Haga clic derecho en el dispositivo con el controlador desactualizado y seleccione Actualizar controlador.
4. Seleccione Búsqueda automática:
- En la ventana 'Actualizar controladores', seleccione Buscar controladores automáticamente. Esto hará que Windows escanee su computadora e Internet en busca del controlador más reciente disponible.
5. Instale el controlador más reciente:
- Si se encuentra un controlador más nuevo, Windows lo descargará e instalará automáticamente.
6. Reiniciar la computadora:
- Una vez que se complete la instalación del controlador, reinicie su computadora para aplicar completamente los cambios.
7. Descarga manual del controlador (opcional):
- Si la actualización automática no encuentra un controlador adecuado, puede buscar y descargar manualmente el controlador más reciente desde el sitio web del fabricante del dispositivo. Asegúrese de descargar el controlador compatible con su versión específica de Windows 11 y modelo de hardware.
8. Instalar el controlador descargado:
- Una vez que haya descargado el controlador, haga doble clic en el archivo del instalador y siga las instrucciones en pantalla para completar la instalación.
9. Verificar el estado del dispositivo:
- Una vez completada la instalación del controlador, regrese al Administrador de dispositivos. El signo de exclamación amarillo debería desaparecer, lo que indica que el dispositivo funciona correctamente con el controlador actualizado.
10. Repita para otros dispositivos:
- Repita los pasos anteriores para cualquier otro dispositivo con controladores desactualizados.
Recuerde que la actualización de controladores a veces puede presentar nuevos problemas. Si encuentra algún problema después de actualizar un controlador, considere volver a la versión anterior del controlador. Se recomienda actualizar periódicamente los controladores, pero realizar comprobaciones exhaustivas antes de actualizar es esencial para garantizar un sistema fluido y sin problemas.