1. Abra el Administrador de dispositivos:
- Presione la tecla Windows + X, luego seleccione "Administrador de dispositivos" en el menú.
- Alternativamente, puede presionar la tecla Windows + R, escribir "devmgmt.msc" y presionar Enter.
2. Busque el controlador de dispositivo que desea desinstalar:
- En el Administrador de dispositivos, expanda la categoría que contiene el dispositivo que desea desinstalar. Por ejemplo, si desea desinstalar el controlador de pantalla, expanda la categoría "Adaptadores de pantalla".
- Haga clic derecho en el controlador del dispositivo y seleccione "Propiedades" en el menú contextual.
3. Desinstale el controlador del dispositivo:
- En la ventana de propiedades del dispositivo, cambie a la pestaña "Controlador".
- Haga clic en el botón "Desinstalar dispositivo".
- Confirme la desinstalación haciendo clic en el botón "Desinstalar" en el cuadro de diálogo de confirmación.
- Windows eliminará el controlador del dispositivo y reiniciará su computadora si es necesario.
4. Reinstale el controlador del dispositivo:
- Después de reiniciar su computadora, Windows buscará e instalará automáticamente el controlador de dispositivo apropiado.
- Si Windows no puede encontrar un controlador adecuado, es posible que deba descargar el controlador más reciente del sitio web del fabricante e instalarlo manualmente.
- Una vez que haya descargado el controlador, haga doble clic en el archivo del instalador y siga las instrucciones en pantalla para completar la instalación.
5. Reinicie su computadora:
- Una vez completada la instalación del controlador, reinicie su computadora para asegurarse de que los cambios surtan efecto.
Si sigue estos pasos, podrá desinstalar y reinstalar con éxito los controladores de dispositivos en Windows 10. Este paso de solución de problemas a menudo puede resolver problemas con dispositivos como tarjetas gráficas, tarjetas de sonido, adaptadores de red y más.