1. Complejidad: Las computadoras son máquinas increíblemente complejas, compuestas de numerosas capas de hardware, software y firmware. Esta complejidad hace que sea difícil comprender y asegurar completamente todas las vulnerabilidades potenciales. Incluso se puede explotar un pequeño defecto en un componente para comprometer todo el sistema.
2. Trust: Las computadoras están diseñadas para confiar en datos e instrucciones de varias fuentes. Esta confianza es esencial para su funcionalidad, pero crea una vulnerabilidad. Los actores maliciosos pueden explotar esta confianza introduciendo datos o código comprometidos, obteniendo acceso y control no autorizados sobre el sistema.
Estos dos factores funcionan en conjunto para hacer que la seguridad informática sea un desafío constante. A medida que avanza la tecnología, la complejidad de los sistemas aumenta, mientras que los atacantes buscan constantemente nuevas formas de explotar la confianza y las vulnerabilidades. Esta carrera armamentista en curso requiere una vigilancia y adaptación constantes para mantener seguras las computadoras.