1. Protección de datos y activos: Las fuertes medidas de seguridad salvaguardan la información confidencial del acceso, robo o daño no autorizados. Esto incluye datos personales, registros financieros, propiedad intelectual y otros activos comerciales críticos. Esta protección ayuda a mantener la privacidad, prevenir la pérdida financiera y garantizar la continuidad de las operaciones.
2. aumentó la confianza y la confianza: Las prácticas de seguridad robustas generan confianza entre los usuarios, los clientes y las partes interesadas. Es más probable que las personas se involucren y confíen en organizaciones que demuestran un compromiso para proteger su información y activos. Esto se traduce en una mayor lealtad del cliente, asociaciones más fuertes y una imagen pública más favorable.