- Fraude cibernético y estafas financieras:Implica investigar actividades fraudulentas, robo de identidad y estafas financieras que se realizan en línea o por medios electrónicos.
- Acecho cibernético y acoso en línea:la Policía Cibernética investiga casos de acoso en línea, acoso cibernético y otras formas de abuso digital que ocurren a través de las redes sociales, el correo electrónico o las plataformas en línea.
- Hackeo y acceso no autorizado:esto incluye la investigación de casos en los que personas obtienen acceso no autorizado a sistemas informáticos, redes o datos confidenciales sin permiso autorizado.
- Pornografía infantil y explotación infantil en línea:las unidades de la Policía Cibernética desempeñan un papel crucial en la investigación y lucha contra la explotación infantil en línea y la distribución de material de abuso sexual infantil.
- Malware y ciberataques:la Policía Cibernética investiga casos que involucran la creación y distribución de software malicioso (malware), como virus, gusanos, ransomware y otros ciberataques que interrumpen o dañan los sistemas informáticos.
- Delitos contra la propiedad intelectual:Implica investigar casos de infracción de derechos de autor, violaciones de marcas y otros delitos contra la propiedad intelectual que ocurren en línea.
- Ciberterrorismo:Las unidades de la Policía Cibernética también trabajan para prevenir e investigar el ciberterrorismo, que implica el uso de medios y redes electrónicos para realizar actos de terrorismo o perturbaciones.
Los agentes de la Policía Cibernética están capacitados en análisis forense digital, seguridad informática y técnicas de investigación específicamente relacionadas con los delitos cibernéticos. Colaboran con otros organismos encargados de hacer cumplir la ley, organizaciones del sector privado y socios internacionales para abordar eficazmente las amenazas cibernéticas y llevar a los ciberdelincuentes ante la justicia.