* El infrarrojo ya no se usa comúnmente para LAN inalámbricos: Wi-Fi (usando ondas de radio) ha reemplazado en gran medida a los infrarrojos para las redes.
* Ancho de banda limitado: El infrarrojo tiene un ancho de banda mucho más bajo en comparación con las ondas de radio, lo que lo hace inadecuado para la transferencia de datos de alta velocidad.
* Línea de visión: La comunicación infrarroja requiere una línea de visión directa entre dispositivos, que puede ser una limitación importante en entornos prácticos.
* Factores variables: La tasa operativa máxima dependería de factores como:
* Técnicas de modulación: Las diferentes técnicas de modulación utilizadas con infrarrojos pueden influir en la velocidad.
* Distancia: Cuanto más se separen los dispositivos, menor será la posible velocidad de datos.
* obstáculos: Los obstáculos pueden bloquear las señales infrarrojas, disminuyendo la tasa de operación.
* potencia: La potencia del transmisor y el receptor infrarrojos afecta la distancia y la velocidad de datos.
Ejemplos históricos:
* Algunos LAN infrarrojos tempranos (como IRDA) admitieron velocidades de hasta 4 Mbps. Sin embargo, estos fueron mucho más lentos que las soluciones Wi-Fi contemporáneas.
Conclusión:
Si bien el infrarrojo alguna vez se usó en algunas aplicaciones LAN tempranas, no es práctico para las redes modernas debido a sus limitaciones. Wi-Fi, con sus velocidades más altas y mayor flexibilidad, se ha convertido en la tecnología dominante para las LAN inalámbricas.