1. Preocupaciones de seguridad: Las señales inalámbricas se pueden interceptar más fácilmente que las conexiones con cable, lo que las hace más vulnerables al acceso no autorizado. Esto requiere medidas de seguridad adicionales como contraseñas seguras, cifrado y posiblemente un firewall.
2. Rango e interferencia limitados: Las señales inalámbricas pueden debilitarse por obstáculos físicos como paredes, o interferir con otros dispositivos electrónicos. Esto puede conducir a conexiones caídas o velocidades más lentas, especialmente en áreas más grandes.