1. Acceso abierto: Las redes no seguras no requieren contraseña ni medidas de seguridad para conectarse. Cualquier persona dentro del alcance puede acceder a la red, lo que significa que cualquiera puede unirse y monitorear sus actividades en línea.
2. Escuchas: Las redes no seguras facilitan que los espías intercepten y capturen la información confidencial que usted transmite, incluidos datos personales, contraseñas, información financiera y más.
3. Robo de datos: Los atacantes pueden utilizar redes no seguras para robar datos confidenciales, como credenciales de inicio de sesión, detalles de tarjetas de crédito o documentos personales, ya que no hay cifrado para proteger sus datos.
4. Distribución de malware: Las redes no seguras pueden ser un caldo de cultivo para la distribución de malware. Los atacantes pueden colocar archivos infectados con malware en la red que pueden comprometer sus dispositivos y robar información personal.
5. Ataques de intermediario: Los atacantes pueden posicionarse entre usted y el punto de acceso a la red, interceptando sus comunicaciones y retransmitiéndolas, permitiéndoles monitorear e incluso modificar su tráfico.
6. Ataques de denegación de servicio (DoS): Los atacantes pueden lanzar ataques DoS en redes no seguras, interrumpiendo su conexión a Internet o incluso toda la red, dificultando el acceso de los usuarios legítimos a la red.
7. Acceso no autorizado: Las redes no seguras permiten que cualquier persona se conecte, incluidos potencialmente usuarios malintencionados, piratas informáticos o ciberdelincuentes que pueden obtener acceso a sus dispositivos personales.
8. Tráfico de red no seguro: Dado que no hay cifrado en una red no segura, todo el tráfico de la red, incluida la información personal y los datos confidenciales, se transmite en texto sin formato, lo que lo hace vulnerable a la interceptación.
9. Consecuencias legales: Dependiendo de las regulaciones y leyes locales, conectarse a una red no segura puede ser ilegal o ir en contra de las políticas de la empresa, especialmente en entornos públicos o corporativos.
10. Falta de soporte técnico: Las redes no seguras a menudo carecen de soporte técnico y gestión adecuados. Si tiene problemas o inquietudes sobre su seguridad, es posible que no haya un equipo dedicado para ayudarlo.
Si decide conectarse a una red inalámbrica no segura, es esencial tomar precauciones como evitar transacciones confidenciales, no acceder a cuentas personales, usar una VPN para cifrar su tráfico y estar atento a posibles amenazas. Sin embargo, en general es recomendable evitar las redes no seguras siempre que sea posible y optar por redes seguras protegidas con contraseña para garantizar su privacidad y seguridad.