Las redes inalámbricas ad hoc tienen un alcance de transmisión que normalmente está limitado a unos pocos cientos de metros. Esto se debe a que las redes ad hoc utilizan radios de baja potencia que no están diseñadas para comunicaciones de largo alcance. El alcance real de una red ad hoc dependerá de varios factores, incluida la potencia de transmisión de las radios, el entorno en el que se implementa la red y la cantidad de dispositivos en la red.
En general, las redes ad hoc son más adecuadas para aplicaciones de corto alcance como:
- Redes de área personal (PAN)
- Redes de área local (LAN)
- Redes de pequeñas oficinas/oficinas en el hogar (SOHO)
Las redes ad hoc no son adecuadas para aplicaciones de largo alcance como:
- Redes de área amplia (WAN)
- Redes móviles
- acceso a internet