Las cuentas de usuario locales se usan comúnmente en redes domésticas, oficinas pequeñas o en situaciones donde no es necesario acceder a las cuentas de usuario desde múltiples dispositivos o ubicaciones. También se pueden usar junto con cuentas de usuario de red en escenarios donde ciertas tareas o funciones deben realizarse localmente sin requerir conectividad de red.
Cada cuenta de usuario local tiene su nombre de usuario, contraseña y conjunto de permisos únicos, que están controlados por el sistema operativo de la computadora local. Los permisos de usuario determinan qué tareas puede realizar la cuenta, como instalar software, cambiar la configuración del sistema o acceder a ciertos archivos y carpetas.
Para mejorar la seguridad, se pueden crear cuentas de usuario locales con contraseñas seguras y se pueden asignar cuidadosamente permisos de usuario para limitar el riesgo de acceso no autorizado o modificación del sistema y los datos de la computadora.
Las cuentas de usuario locales son una forma conveniente de administrar el acceso de los usuarios en computadoras individuales, pero no brindan el mismo nivel de flexibilidad y control centralizado que las cuentas de usuario de red o de dominio en entornos más grandes.