He aquí por qué:
* Diseñado para el rendimiento: Los servidores están construidos con procesadores potentes, grandes cantidades de RAM y, a menudo, tienen múltiples discos duros configurados para redundancia y velocidad. Esto les permite manejar la gran carga de trabajo de administrar una red y sus recursos.
* Sistemas operativos de red: Los servidores ejecutan sistemas operativos especializados, como distribuciones de Windows Server o Linux diseñadas para servidores, que están optimizados para tareas de red, administración de usuarios y seguridad.
* Gestión de recursos centralizados: Los servidores actúan como el centro central para compartir archivos, aplicaciones, impresoras y acceso a Internet con otras computadoras (clientes) en la red.
* Operación siempre encendida: Los servidores están diseñados para el tiempo de actividad continuo y a menudo se configuran con fuentes de alimentación redundantes y conexiones de red para minimizar el tiempo de inactividad.
Nota importante: Si bien una poderosa PC de escritorio puede funcionar técnicamente como un servidor, generalmente no se recomienda para nada más allá del hogar pequeño o las redes de oficina muy básicas. Los servidores dedicados se crean para las demandas específicas de la gestión de la red y proporcionan una mejor confiabilidad, seguridad y rendimiento.