Cuando abre un sitio web, el navegador crea un nuevo proceso y le asigna memoria. Esta memoria se utiliza para almacenar HTML, CSS, JavaScript e imágenes del sitio web. Sin embargo, si abre varios sitios web al mismo tiempo, la cantidad total de memoria requerida puede exceder la cantidad de memoria física disponible.
La memoria virtual resuelve este problema creando un espacio de direcciones virtuales para cada proceso. Este espacio de direcciones virtuales es mucho mayor que el espacio de memoria física, por lo que cada proceso puede tener su propio espacio de memoria privado. Cuando un proceso accede a una dirección de memoria, el sistema de memoria virtual la traduce a la dirección de memoria física correspondiente.
Este proceso es transparente para el usuario, por lo que puede abrir varios sitios web al mismo tiempo sin preocuparse por quedarse sin memoria.