En una red inalámbrica, un repetidor recibe una señal inalámbrica desde un punto de acceso y la retransmite a otro punto de acceso. Esto permite que los dispositivos conectados al repetidor accedan a la red inalámbrica, incluso si están fuera del alcance del punto de acceso original.
Los repetidores se utilizan normalmente para ampliar la longitud de una red cuando no es posible o práctico tender cables adicionales o instalar puntos de acceso adicionales. Son relativamente económicos y fáciles de instalar, lo que los convierte en una solución rentable para ampliar el alcance de una red.
Estos son los pasos sobre cómo un repetidor extiende la longitud de una LAN:
1. El repetidor recibe una señal del primer segmento de red. Esta señal puede ser cableada o inalámbrica.
2. El repetidor amplifica la señal. Esto es necesario porque es posible que la señal se haya debilitado a medida que viajaba por la red.
3. El repetidor retransmite la señal al segundo segmento de red. Esto permite que los dispositivos conectados al segundo segmento de red reciban la señal.
4. Los dispositivos en el segundo segmento de red ahora pueden comunicarse con los dispositivos en el primer segmento de red. Esto es posible aunque los dispositivos estén físicamente separados por una distancia mayor.
Los repetidores son una herramienta importante para ampliar la longitud de una red. Son relativamente económicos y fáciles de instalar, lo que los convierte en una solución rentable para ampliar el alcance de una red.