Introducido en 1996, es muy similar al modelo PRAM. Su simplicidad lo hace útil en el análisis de algoritmos paralelos. A diferencia del modelo PRAM, el modelo LogP tiene en cuenta el coste de comunicación entre procesadores. La complejidad de un algoritmo se expresa, por tanto, en términos de tiempo y de número de mensajes utilizados.
Los principales parámetros del modelo LogP son :
- L:latencia máxima (el tiempo de inicio requerido para un mensaje),
- o:gastos generales por enviar un mensaje (un coste fijo),
- g:el tiempo para transmitir una palabra entre dos procesadores, y
- P:el número de procesadores del sistema.
El modelo LogP se puede utilizar para definir modelos más complejos que capturen las características específicas de diferentes arquitecturas paralelas, como el modelo BSP (Bulk Synchronous Parallel).