1. Comprueba tu conexión a Internet.
- Asegúrese de tener una conexión a Internet estable y rápida. Este problema suele ocurrir debido a una mala conectividad de la red.
2. Reinicia tu dispositivo.
- A veces, simplemente reiniciar tu PC, PlayStation o Xbox puede resolver el problema.
3. Actualiza Fortnite.
- Asegúrate de tener instalada la última versión de Fortnite. Las actualizaciones pueden incluir correcciones de errores y mejoras en la estabilidad del juego.
4. Busque actualizaciones del sistema.
- Actualiza el sistema operativo de tu dispositivo a la última versión disponible. Las actualizaciones del sistema pueden incluir mejoras en la conectividad de la red y otros problemas relacionados con los juegos.
5. Deshabilite o restablezca su firewall y software antivirus.
- Algunos programas de seguridad pueden interferir con las capacidades de red del juego. Deshabilite o deshabilite temporalmente su firewall y software antivirus para ver si le permite unirse a grupos.
6. Cambie su configuración de DNS.
- Utilice el DNS público de Google (8.8.8.8 y 8.8.4.4) o el DNS de Cloudflare (1.1.1.1 y 1.0.0.1) cambiando la configuración de DNS en su dispositivo.
7. Limpia el caché de Fortnite.
- En PlayStation y Xbox, ve al mosaico del juego en el tablero. presiona el botón "Opción" (en PlayStation) o el botón "Menú" (en Xbox) y selecciona "Detalles del juego". Luego, elige la opción para borrar el caché del juego.
8. Reinicie su módem y enrutador.
- Desenchufe su módem y enrutador de la fuente de alimentación durante unos minutos y luego vuelva a enchufarlos. Esto puede ayudar a actualizar su conexión de red.
9. Utilice una conexión por cable en lugar de inalámbrica.
- Si es posible, conecte su dispositivo a su enrutador mediante un cable Ethernet en lugar de depender de Wi-Fi. Las conexiones por cable suelen ser más estables.
10. Póngase en contacto con el soporte de Epic Games.
- Si ninguna de las soluciones anteriores funciona, puedes comunicarte con el soporte de Epic Games para informar el problema y buscar más ayuda. Bríndeles detalles relevantes sobre el problema, incluido el código de error y cualquier otra información relevante.