1. Problemas de visualización: Algunos virus pueden provocar alteraciones visuales en la pantalla, como parpadeos, colores distorsionados o líneas o patrones aleatorios. Estos fallos ocurren porque los virus pueden interferir con el controlador de gráficos u otro software responsable de representar la pantalla.
2. Ransomware: El ransomware es un tipo de malware que cifra archivos en una computadora y exige el pago de un rescate para desbloquearlos. Si el ransomware cifra archivos esenciales del sistema, incluidos los relacionados con la configuración de pantalla, puede interrumpir el funcionamiento normal de la computadora y provocar una pantalla en blanco o distorsionada.
3. Secuestro del navegador: Los virus pueden secuestrar el navegador web predeterminado y modificar su configuración, incluida la página de inicio y el motor de búsqueda. Cuando abre el navegador, es posible que vea una página de inicio desconocida o resultados de búsqueda manipulados o llenos de publicidad.
4. Bloqueos de pantalla: Algunos virus están diseñados para bloquear la pantalla de la computadora y mostrar un mensaje exigiendo un pago o amenazando con eliminar archivos. Estos virus impiden eficazmente que usted acceda a su computadora y pueden causar interrupciones considerables.
5. Instalación de software malicioso: Los virus pueden instalar otro software malicioso, incluido adware, spyware y criptomineros, que pueden consumir recursos del sistema y ralentizar la computadora. Esta desaceleración puede afectar el rendimiento general de la computadora, incluida la frecuencia de actualización de la pantalla, lo que resulta en una visualización lenta o entrecortada.
6. Corrupción de datos: Los virus pueden dañar los archivos almacenados en la computadora, incluidas imágenes, videos y documentos. Si el virus daña archivos relacionados con el controlador de pantalla o la configuración de gráficos, puede provocar problemas de visualización o incluso un fallo total en el funcionamiento correcto de la pantalla.
Es importante tener en cuenta que los virus en sí no atacan ni infectan directamente las pantallas de las computadoras. En cambio, afectan el software o los componentes del sistema que controlan la pantalla. Por lo tanto, proteger su computadora de virus a través de sólidas medidas de seguridad, como software antivirus y mantenerse actualizado con las actualizaciones del sistema, es crucial para garantizar el correcto funcionamiento de su computadora y su pantalla.