1. Prevención de conflictos: Si está instalando un nuevo dispositivo que comparte la funcionalidad con el anterior, eliminar los controladores antiguos asegura que el nuevo dispositivo pueda instalar sus propios controladores sin interferencia. Esto puede ayudar a prevenir conflictos y garantizar que el nuevo dispositivo funcione correctamente. Esto es especialmente relevante si está actualizando un dispositivo, como reemplazar una tarjeta gráfica más antigua con una más nueva.
2. Limpieza del espacio: Los conductores y los paquetes de conductores pueden ocupar un espacio de disco significativo. Eliminarlos después de desinstalar el dispositivo puede liberar almacenamiento, especialmente si está tratando con múltiples dispositivos o tiene espacio de almacenamiento limitado.
Nota importante: Si bien eliminar los controladores a veces es necesario, no siempre se recomienda. En algunos casos, puede provocar problemas si luego necesita reinstalar el dispositivo o si planea usar el dispositivo nuevamente.
Considere estas alternativas antes de eliminar los controladores:
* Uso del administrador de dispositivos: Windows 'Device Manager ofrece una opción de "desinstalar" para dispositivos. Esto generalmente elimina el dispositivo del sistema y elimina los controladores asociados, pero a menudo conserva algunos archivos del controlador para una posible reinstalación.
* Usando la utilidad de desinstalación: Muchos dispositivos vienen con sus propias utilidades de desinstalación que eliminan limpiamente el dispositivo y sus controladores asociados.
Antes de realizar cualquier cambio, asegúrese de hacer una copia de seguridad de sus archivos importantes e investigar el dispositivo específico con el que está trabajando para ver cuál es el procedimiento de desinstalación recomendado.