Al exportar datos, implica guardar información específica de la base de datos del sistema o la ubicación actual del archivo en un formato digital separado de acuerdo con la configuración elegida por el usuario o los requisitos predefinidos. Los datos exportados suelen ser compatibles con varios formatos de archivo u otro software, lo que los hace transferibles y accesibles con diferentes programas o dispositivos externos.
Algunos ejemplos comunes de exportación de datos incluyen enviar un documento de hoja de cálculo por correo electrónico como formato de archivo CSV o migrar cuentas de usuario, contactos o configuraciones de un servicio en la nube a otro. La exportación de datos permite el movimiento o la difusión conveniente de información más allá de su plataforma o ecosistema original.