Los distribuidores compuestos deben mantener registros separados para los suministros sujetos a impuestos y exentos, y deben presentar sus declaraciones de GST con regularidad. También deben cobrar el GST a la tasa aplicable sobre todas las ventas sujetas a impuestos.
Los beneficios de ser un distribuidor compuesto incluyen:
1) Cumplimiento del GST simplificado: Los distribuidores compuestos son elegibles para el cumplimiento del GST simplificado, lo que significa que no tienen que cobrar el GST por las ventas de bienes y servicios a entidades no registradas.
2) Reducción de trámites: Los distribuidores de compuestos no están obligados a mantener registros separados para los suministros sujetos a impuestos y exentos, lo que puede reducir el papeleo y la carga administrativa.
3) Aumento del flujo de caja: Los distribuidores compuestos no tienen que pagar GST por las compras de bienes y servicios de entidades no registradas, lo que puede aumentar el flujo de caja.
Las desventajas de ser un distribuidor compuesto incluyen:
1) Tasas GST más altas: Los distribuidores compuestos deben cobrar el GST a la tasa aplicable a todas las ventas sujetas a impuestos, que puede ser más alta que la tasa que cobraría un distribuidor regular.
2) Crédito por impuesto soportado limitado: Los comerciantes compuestos solo son elegibles para recibir crédito por impuesto soportado en compras de bienes y servicios de entidades registradas, lo que puede limitar su capacidad para reclamar deducciones fiscales.
3) Potencial de auditoría: Es más probable que los distribuidores compuestos sean auditados por las autoridades del GST, ya que se considera que tienen un mayor riesgo de evasión del GST.
En general, los distribuidores compuestos pueden ser una buena opción para las empresas que tienen una combinación de suministros sujetos a impuestos y exentos y que desean simplificar su cumplimiento del GST. Sin embargo, es importante sopesar los beneficios y desventajas de ser un distribuidor compuesto antes de tomar una decisión.