Los protectores de pantalla no se utilizan para prolongar la vida útil de una tarjeta gráfica. Su objetivo principal era evitar que se grabara una imagen persistente (quemado) en la pantalla en la época de los monitores CRT, que eran susceptibles a este problema.
Este tipo de monitores dejarían imágenes fantasma del contenido de la pantalla anterior si se mostraran contenidos estáticos iguales o similares durante un período prolongado. Los protectores de pantalla ayudaron a mitigar esto al mostrar contenido en movimiento o cambiante cuando el sistema estaba inactivo, minimizando el riesgo de desgaste.
Con la llegada de los monitores LCD y LED modernos, los protectores de pantalla ya no son necesarios para evitar que la pantalla se queme y no tienen ninguna correlación directa con la vida útil o la longevidad de una tarjeta gráfica.