El IPC es sólo un factor que afecta la velocidad a la que se moverá el ratón. El peso del ratón y la superficie sobre la que se utiliza también influyen. Un mouse más pesado será más lento que uno más liviano, y un mouse que se usa sobre una superficie lisa será más rápido que un mouse que se usa sobre una superficie rugosa.
Además del IPC, algunos ratones también tienen tasas de sondeo ajustables. La tasa de sondeo determina la frecuencia con la que el mouse informa su posición a la computadora. Una tasa de sondeo más alta significa que el mouse responderá mejor, pero también puede ejercer presión sobre el procesador de la computadora.
La mayoría de los ratones tienen una frecuencia de sondeo de entre 125 y 1000 Hz. Algunos ratones para juegos pueden tener una frecuencia de sondeo de hasta 8000 Hz.
Al ajustar el IPC, la tasa de sondeo y el peso del mouse, los usuarios pueden encontrar la combinación perfecta de velocidad y precisión para sus necesidades.