Rasgos como la longitud de la cola están controlados por genes y, a menos que se produzca una mutación específica en los genes responsables del desarrollo de la cola, las colas de los ratones no se verán afectadas. Incluso si tal mutación ocurriera, sería muy poco probable que ocurriera como resultado directo del corte de colas.
En resumen, cortar las colas es un factor ambiental que no afecta directamente la composición genética de los organismos y, por lo tanto, no puede dar como resultado la creación de una cepa con genes para colas cortas.