Un teclado virtual, por otro lado, es un programa de software que simula la funcionalidad de un teclado real. No está conectado físicamente a la computadora, pero puedes usarlo para ingresar texto como si lo estuviera. Los teclados virtuales se utilizan a menudo en dispositivos móviles como teléfonos inteligentes y tabletas, donde no hay suficiente espacio para un teclado físico. También se pueden utilizar en determinadas aplicaciones informáticas o páginas web.
Estas son algunas de las principales diferencias entre teclados reales y teclados virtuales:
Factor de forma: Los teclados reales tienen teclas físicas que se pueden presionar, mientras que los teclados virtuales se muestran en una pantalla y requieren entrada táctil o del mouse.
Durabilidad: Los teclados reales normalmente pueden soportar más desgaste que los teclados virtuales. Los teclados virtuales pueden volverse menos receptivos con el tiempo, especialmente si la pantalla está manchada o dañada.
Funcionalidad: Los teclados reales suelen tener una gama más amplia de teclas y funciones, como teclados numéricos, teclas de flecha y teclas de acceso directo especiales. Es posible que los teclados virtuales no tengan todas estas funciones y la distribución de las teclas puede variar según el dispositivo y la aplicación.
Costo: Los teclados reales pueden variar en precio desde unos pocos dólares hasta cientos de dólares, según el tipo y las características. Los teclados virtuales suelen estar integrados en dispositivos o aplicaciones y no requieren inversión adicional.
Usabilidad: Los teclados reales generalmente se consideran más ergonómicos y cómodos de usar durante períodos prolongados de tiempo, especialmente para escribir grandes volúmenes de texto. Los teclados virtuales pueden ser más convenientes para uso ocasional o móvil, pero pueden ser menos precisos y causar más fatiga.
Compatibilidad: Los teclados reales generalmente son compatibles con todos los sistemas operativos y dispositivos que admiten la entrada por teclado. Es posible que los teclados virtuales no sean compatibles con ciertos dispositivos o sistemas operativos, y el diseño y la funcionalidad pueden variar según las diferentes plataformas.
En última instancia, la elección entre un teclado real y un teclado virtual depende de sus preferencias individuales, la naturaleza de su trabajo y el dispositivo específico que esté utilizando.