Las ratas son animales muy inteligentes. Se ha demostrado que muestran una variedad de habilidades cognitivas, incluida la resolución de problemas, el aprendizaje y la memoria. En concreto, las ratas han demostrado que pueden resolver laberintos complejos, aprender a navegar en nuevos entornos de forma rápida y eficiente y mostrar habilidades de resolución de problemas para obtener comida o salir de situaciones difíciles. En particular, las ratas se han utilizado ampliamente en experimentos psicológicos debido a su capacidad para aprender el condicionamiento operante y otras tareas cognitivas típicamente empleadas para evaluar la inteligencia en animales.