2. Fuentes de agua: Las ratas también necesitan agua para sobrevivir. Verifique si hay fugas o grifos que goteen y asegúrese de limpiar cualquier derrame.
3. Refugio: A las ratas les gusta anidar en lugares oscuros y protegidos, como debajo de los muebles, armarios y áticos. Sella cualquier agujero o grieta en las paredes y los cimientos, y asegúrate de mantener tu jardín ordenado.
4. Puntos de acceso: Las ratas pueden ingresar a su casa a través de una variedad de puntos de acceso, como agujeros en los cimientos, espacios debajo de las puertas y ventanas abiertas. Sella cualquier agujero o espacio y asegúrate de mantener las puertas y ventanas cerradas cuando no estés en casa.
5. Falta de depredadores: Las ratas temen a los depredadores, como los perros y los gatos. Si no tiene una mascota, considere adquirir una para ayudar a disuadir a las ratas.
6. Proximidad a otras ratas: Las ratas son animales sociales y viven en colonias. Si hay ratas en su vecindario, existe la posibilidad de que se muden a su casa si encuentran comida, agua y refugio.
7. Clima: Las ratas son más activas en climas cálidos, por lo que es más probable que invadan tu casa durante el verano.
8. Construcción: Si está realizando algún trabajo de construcción en su casa, podría molestar a las ratas y hacer que se muden a su casa.