- Cable suelto o desconectado: Verifique si el cable del teclado está bien conectado a la computadora. Intente desconectar y volver a conectar el cable para asegurarse de que esté haciendo una buena conexión.
- Teclado roto: Si el teclado se ha caído o se ha dañado, es posible que tenga problemas internos que impidan que funcione correctamente.
- Problemas con el puerto USB: Si su teclado usa una conexión USB, intente conectarlo a un puerto USB diferente en su computadora. Es posible que algunos puertos USB no proporcionen suficiente energía o velocidad de transferencia de datos para que el teclado funcione correctamente.
2. Problemas de software
- Controladores faltantes o desactualizados: Los controladores de teclado son esenciales para que su computadora se comunique con el teclado y procese las pulsaciones de teclas. Compruebe si los controladores del teclado están instalados y actualizados. Por lo general, puede encontrar los controladores más recientes visitando el sitio web del fabricante y descargando el paquete de controladores más reciente.
- Conflictos de software: Otro software instalado en su computadora puede interferir con el funcionamiento del teclado. Intente deshabilitar o desinstalar cualquier software instalado recientemente y verifique si el teclado comienza a funcionar nuevamente.
3. Problemas con el sistema operativo
- Actualizaciones del sistema: A veces, las actualizaciones de su sistema operativo pueden causar problemas de compatibilidad con ciertos dispositivos, incluidos los teclados. Verifique si hay actualizaciones recientes del sistema que puedan haber afectado la funcionalidad del teclado. Puede intentar volver a una versión anterior del sistema operativo para ver si eso resuelve el problema.
4. Configuración de accesibilidad
- Teclas adhesivas o teclas de filtro: Las funciones de accesibilidad como Sticky Keys y Filter Keys pueden interferir con el funcionamiento normal del teclado. Compruebe si estas funciones están habilitadas y desactívelas si es necesario.
5. Malware o virus
- Infecciones por malware o virus: Algunos malware o virus pueden interrumpir el funcionamiento normal de su computadora, incluido el teclado. Ejecute un análisis completo del sistema con un programa antivirus actualizado para eliminar cualquier amenaza potencial.