La razón más común del dolor de muñeca resultante de escribir es mantener las muñecas rectas y las manos elevadas (una condición llamada extensión de la muñeca) mientras se trabaja con el teclado o el mouse.
En cambio, tus muñecas deben estar en una posición neutral mientras escribes, no dobladas hacia arriba ni hacia abajo. Una posición neutra de la muñeca alinea el antebrazo y la mano para que la muñeca quede recta.