1. Cerrar programas innecesarios:
* Verifique su administrador de tareas: (Presione CTRL+Shift+ESC en Windows) para ver qué programas están utilizando la mayor cantidad de memoria.
* Cerrar aplicaciones de fondo: Muchos programas se ejecutan en segundo plano, consumiendo recursos.
* Deshabilitar programas de inicio: Los programas que se inician automáticamente en el inicio pueden ralentizar su computadora.
2. Libre espacio en el disco:
* Eliminar archivos temporales: Windows tiene una herramienta de limpieza de disco incorporada (busque "limpieza de disco" en el menú de inicio).
* Desinstale programas no utilizados: Eliminar programas que ya no use.
* Mueva archivos grandes al almacenamiento externo: Esto libera espacio en su disco duro, lo que permite que su computadora acceda a los archivos más rápido.
3. Optimice su memoria virtual:
* Ajuste la memoria virtual: Windows utiliza una parte de su disco duro como RAM virtual. Aumentar el tamaño de su memoria virtual puede ayudar si su RAM física es limitada. Sin embargo, esto puede ralentizar el acceso al disco, así que use esto con moderación.
4. Actualice su sistema operativo y controladores:
* Actualice su sistema operativo: Las nuevas actualizaciones a menudo incluyen mejoras de rendimiento.
* Actualice a sus controladores: Los conductores obsoletos pueden causar conflictos y ralentizar su sistema.
5. Use un limpiador RAM:
* Instale un limpiador de ram: Estos programas tienen como objetivo liberar la memoria no utilizada cerrando los procesos de fondo. Sin embargo, tenga cuidado con el uso de estos, ya que algunos pueden tener consecuencias no deseadas.
Nota importante: Si bien estos métodos pueden ayudar a mejorar el rendimiento, no son sustitutos para actualizar su RAM. Si su computadora se está ejecutando constantemente en la memoria, actualizar su RAM es la mejor manera de garantizar un rendimiento suave y eficiente.