He aquí por qué:
* Disipación de calor: Las placas base generan calor, pero generalmente es manejado por los componentes mismos (como la CPU y la GPU) que tienen sus propios fanáticos. La superficie de la placa base es lo suficientemente grande como para disipar pasivamente una cantidad razonable de calor.
* Diseño y espacio: Incluir un ventilador en la placa base agregaría complejidad, costo y ocuparía un espacio valioso, especialmente en factores de forma más pequeños como Mini-ITX.
* ruido: Un ventilador adicional en la placa base podría contribuir al ruido del sistema.
Sin embargo:
* Algunas placas base tienen disipadores de calor: Muchas placas base tienen disipadores de calor, especialmente cerca del chipset y los componentes de entrega de energía, para ayudar a disipar el calor. Estos disipadores de calor a veces se pueden enfriar pasivamente o tener un pequeño ventilador adjunto.
* Enfriamiento activo: Algunas placas base especializadas, particularmente aquellas diseñadas para servidores o estaciones de trabajo de alta gama, pueden tener ventiladores incorporados para el enfriamiento activo del chipset u otros componentes.
En última instancia:
La presencia de un ventilador en la placa base depende de su diseño específico y su uso previsto. La mayoría de las placas base de consumo regulares no tienen fanáticos, pero es posible encontrar algunos con soluciones de enfriamiento dedicadas.