He aquí por qué:
* Procesamiento intenso: Las GPU están diseñadas para un procesamiento altamente paralelo, especialmente para la representación gráfica y los cálculos. Pueden manejar cantidades masivas de datos a velocidades increíblemente altas, lo que lleva a un alto consumo de energía.
* Aplicaciones de juegos y de alta gama: Los videojuegos modernos y las aplicaciones exigentes como la edición de video, el modelado 3D y las simulaciones científicas dependen en gran medida de las GPU, empujándolas a sus límites y al aumento del uso de energía.
* Características avanzadas: Las características como el trazado de rayos, los DLS y la alta tasa de actualización aumentan aún más la carga de trabajo y las demandas de energía en las GPU.
Si bien la CPU (Unidad de Procesamiento Central) también puede consumir una cantidad significativa de energía, especialmente para tareas exigentes como la codificación de video, la GPU generalmente la supera en el uso de energía por las razones mencionadas anteriormente.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el consumo de energía puede variar mucho según los componentes, el uso y la configuración específicos.