Es importante tener en cuenta que cada disco duro requerirá su propia fuente de alimentación y un cable SATA o SCSI. Si la computadora no tiene suficientes conectores de alimentación o puertos SATA/SCSI, puede que sea necesario instalar una tarjeta controladora de disco duro adicional.
Una vez que los discos duros están instalados físicamente, se pueden configurar utilizando la herramienta de administración de discos del sistema operativo. Esta herramienta permitirá al usuario crear particiones en los discos duros y formatearlas con un sistema de archivos.
Una vez formateados los discos duros, se pueden montar en el sistema operativo. Esto los hará accesibles al usuario y disponibles para su uso.