1. Enclosure: Las unidades externas requieren un recinto físico para proteger la unidad y proporcionar opciones de conectividad como USB o Thunderbolt. Esto agrega costo al proceso de fabricación.
2. Fuente de alimentación: Las unidades externas a menudo tienen su propia fuente de alimentación, que puede ser una unidad separada o integrado en el recinto. Esto se suma al costo general.
3. Conectividad: Las unidades externas deben estar equipadas con conectores y circuitos para comunicación con la computadora. Esto agrega complejidad y costo a los componentes.
4. Durabilidad: Las unidades externas están diseñadas para ser más duraderas y portátiles, a menudo con materiales que absorben los choques y recintos resistentes. Esto contribuye al precio más alto.
5. Características: Algunas unidades externas ofrecen características adicionales como lectores de tarjetas SD incorporadas, software de copia de seguridad o protección de contraseñas. Estas características aumentan el costo.
6. Branding y marketing: Las unidades externas a menudo provienen de marcas conocidas y se comercializan para usos específicos, como el almacenamiento de medios o la copia de seguridad. Estos factores pueden influir en los precios.
7. Conveniencia y portabilidad: La conveniencia de poder mover datos fácilmente y acceder a él en múltiples computadoras contribuye al precio más alto.
8. Volúmenes de producción más bajos: Las unidades externas generalmente se producen en volúmenes más bajos que las unidades internas, lo que puede conducir a mayores costos unitarios.
9. Demanda del mercado: Existe una demanda de soluciones de almacenamiento portátiles y fáciles de usar, lo que permite a los fabricantes cobrar una prima para las unidades externas.
Es importante tener en cuenta que la diferencia de precios entre las unidades externas e internas puede variar mucho según factores como la capacidad de almacenamiento, la marca, las características y el tipo de unidad (HDD vs. SSD). Sin embargo, las razones descritas anteriormente generalmente explican por qué las unidades externas suelen ser más caras.