Sin embargo, algunas computadoras comúnmente consideradas "malas" comparten estos rasgos:
* Rendimiento extremadamente lento: Esto podría deberse a hardware obsoleto, falta de RAM o un procesador lento.
* Fallos y errores frecuentes: El software o el hardware defectuoso mal diseñado pueden conducir a la frecuente inestabilidad del sistema.
* Almacenamiento y memoria limitadas: Esto restringe su capacidad para instalar y ejecutar programas, almacenar archivos y realizar múltiples tareas de manera efectiva.
* Mala calidad de construcción: Los componentes frágiles, la construcción endeble y los problemas de sobrecalentamiento pueden hacer que una computadora sea poco confiable y frustrante.
* Falta de soporte y actualizaciones: Los sistemas operativos y los conductores obsoletos pueden dejarlo vulnerable a las amenazas de seguridad y limitar su acceso al último software.
* Alto precio por bajo rendimiento: Algunas computadoras pueden ser demasiado caras para las características y especificaciones que ofrecen.
En última instancia, la peor computadora es la que no satisface sus necesidades y expectativas específicas. Si está buscando una computadora nueva, asegúrese de investigar y comparar diferentes modelos antes de realizar una compra.