En los primeros días de la informática, las computadoras Macintosh se consideraban una plataforma separada de las PC. Esto se debía al hecho de que las computadoras Macintosh usaban su propio hardware y sistema operativo, lo que las hacía incompatibles con las PC. Sin embargo, a medida que la industria tecnológica evolucionó y se estandarizó, el término "PC" comenzó a usarse de manera más amplia para referirse a todas las computadoras personales, independientemente de si fueron fabricadas por Macintosh u otro fabricante.
Hoy en día, el término "PC" todavía se utiliza para referirse a las computadoras personales en general, pero se usa más comúnmente para referirse a computadoras que ejecutan el sistema operativo Windows. Las computadoras Macintosh ahora se consideran un tipo de computadora personal, pero generalmente se las denomina por su marca en lugar del término genérico "PC".