La primera computadora disponible comercialmente en los EE. UU. fue la UNIVAC I (UNIVersal Automatic Computer I), fabricada por Remington Rand. El 31 de marzo de 1951 se entregó el primer UNIVAC I a la Oficina del Censo de los Estados Unidos. Esto marcó un momento innovador en la historia de la informática, ya que UNIVAC I desempeñó un papel importante en diversas aplicaciones gubernamentales y comerciales.